Desafortunadamente, el gaslighting o luz de gas es un fenómeno muy común y muy cruel. Es una forma de manipulación psicológica, en la cual una persona hace que otra vaya cuestionándose gradualmente su propia memoria, percepción o juicio. Es algo muy cruel, sobre todo, si se supone que tenéis una relación de confianza.
Haz clic en la galería para descubrir si estás siendo víctima de gaslighting.
A continuación, te describimos una serie de signos que tener en cuenta, ya sea en una relación de pareja, de amistad o de trabajo, para identificar si estás siendo víctima de este tipo de manipulación.
Un mentiroso desvergonzado puede soltar las mentiras más escandalosas y descaradas, pero en ese caso sería más fácil de manejar porque entonces simplemente cuestionarías todo lo que dice.
Sin embargo, quienes hace gaslighting quieren que dudes completamente de lo que crees y opinas. Son maestros de la manipulación.
Sabemos que han dicho algo, pero lo niegan completamente. No te darán la razón ni por un segundo.
Entonces, tal vez empieces a dudar de ti mismo.
Este tipo de comportamiento es extremadamente tóxico. Podrían atacar tu carrera, formación, autoestima y esencialmente cualquier cosa que puedan para minar tu carácter.
Te pueden decir lo mal padre o madre que eres y que no mereces tener hijos. No subestimes lo crueles que pueden ser.
Cuando algo ocurre de forma muy gradual, a menudo no nos damos cuenta. Piensa en el envejecimiento, por ejemplo. Si te hacen gaslighting, tal vez simplemente te sientas cada vez más cansado.
Este comportamiento debe identificarse tan pronto como sea posible. Puede ser una manipulación tan efectiva que incluso las personas más seguras de sí mismas e inteligentes pueden acabar agotadas y dudando de su propio criterio.
Hablar es gratis, pero lo que realmente importa son las acciones.
Si sufres gaslighting, te podrían intentar dar todo el refuerzo verbal del mundo, pero nada de eso se corresponde con sus acciones.
Si una persona manipuladora cree que se ha pasado, intentará atraerte de nuevo a tu lado siendo amable contigo.
No obstante, esto es todo parte de su manipulación para que pienses que tal vez no es tan malo para poder seguir haciéndote gaslighting.
La mayor parte de la gente se siente cómoda teniendo estabilidad en su medio y sus relaciones.
Un gaslighter intentará minar tu seguridad en ti mismo y no te permitirá disfrutar de esta sensación de bienestar.
Una técnica clásica de gaslighting es proyectar su mal comportamiento en ti. Por ejemplo, si te están engañando, te acusarán de ser infiel.
Lo mismo puede aplicarse a cualquier atributo negativo que tengan. Esta miserable técnica puede funcionar, porque mientras te defiendes, ellos continúan con su horrible comportamiento.
Quieren controlar tu vida y tu comportamiento y para ello te dirán que otras personas han dicho cosas malas sobre ti, esperando minar tu sistema de soporte.
Lo más probable es que sea todo mentira, ya que son mentirosos. No obstante, despertarán tu inseguridad y acabarán haciendo que pienses que solo puedes confiar en ellos.
Tal vez la técnica más inmoral de todas es hacer que la otra persona dude de su propia cordura y racionalidad.
Si consiguen hacer que dudes de tus propios pensamientos, pueden manipularte hasta hacerte creer que nadie te creerá si hablas de su mal comportamiento.
Lo hacen con intención de que solo puedas apoyarte en ellos y sientas que solo puedes ser honesto con ellos. Cuando en realidad, es todo lo contrario.
Incluso pueden convencerte de que todos tus conocidos, tu familia y amigos te mienten o hablan mal de ti. Así de peligroso puede ser el gaslighting.
Los gaslighters quieren que las emociones te desborden para poder acusarte de ser irracional. Mantén la calma, diles que no compartes su punto de vista.
Si te cuestionas tu propio comportamiento, intenta que eso no ocurre y resiste. Puedes conseguir refuerzo hablando con un amigo.
La terapia puede ayudar, tanto si decides salir de esa relación como si decides intentar arreglarlo. Eso sí, ten en cuenta que un manipulador puede negarse a recibir ayuda.
Si crees que no hay nada que valga la pena salvar, déjalo, por tu propio bien. No esperes que el manipulador acepte que está haciendo algo mal. Solo deja claro que quieres que salga de tu vida.
Todos merecemos ser felices, respetados y no cuestionarnos todo continuamente. Cuando te libres esta situación, haz lo posible por evitar que otro gaslighter entre en tu vida.
¿Estás siendo manipulado? Identifica las tácticas de 'gaslighting'
Te contamos en qué se basa
ESTILO DE VIDA Relaciones
Desafortunadamente, el gaslighting o luz de gas es un fenómeno muy común y muy cruel. Es una forma de manipulación psicológica, en la cual una persona hace que otra vaya cuestionándose gradualmente su propia memoria, percepción o juicio. Es algo muy cruel, sobre todo, si se supone que tenéis una relación de confianza.
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