La Reconquista fue el proceso de recuperación por parte de los cristianos del territorio ocupado por los musulmanes en la Península Ibérica (España y Portugal). Dio comienzo hacia el 720 d.C. tras la victoria de don Pelayo en Covadonga (Asturias, España).
Las guerras duraron 780 años y se cree que cerca de siete millones de personas murieron a consecuencia del conflicto.
La primera cruzada se declaró en 1095. La idea era tomar Jerusalén, por aquel entonces bajo el dominio musulmán. Sin embargo, esto era solo el comienzo de una campaña emprendida por la Iglesia católica romana que acabó por convertirse en una carnicería de 300 años.
Aunque cuesta calcular el número de bajas de la primera, se estima que murieron más de un millón y medio de personas durante todo el periodo de las cruzadas.
Aunque las principales víctimas fueron cristianas y musulmanas, también murieron bastantes judíos.
Las guerras de religión de Francia tuvieron lugar en el siglo XVI. Por aquel entonces, el país se encontraba dividido entre los católicos y los hugonotes (protestantes).
Puede que el conflicto más sangriento de todas estas guerras fuese la matanza de san Bartolomé, ocurrida en 1572 después de que una horda de cristianos atacase a los hugonotes.
Las guerras acabaron cuando el monarca hugonote Enrique III de Navarra pasó a ser Enrique IV de Francia y se convirtió al catolicismo.
En 1598 se promulgó el edicto de Nantes, el cual otorgaba derechos y libertad religiosa a los hugonotes y ponía fin a un conflicto que se había alargado durante 36 años.
Esta guerra tuvo lugar en el Sacro Imperio Romano y duró desde 1618 hasta 1648. Comenzó como un conflicto entre católicos y protestantes en Praga y acabó yendo a más.
Se la recuerda como una de las guerras más devastadoras en suelo europeo y se cree que unos ocho millones de personas murieron durante el proceso, si bien el conflicto también se cobró innumerables heridos.
La guerra tuvo lugar durante una ola de frío en Europa, por lo que las bajas temperaturas afectaron a los cultivos. Esto, a su vez, hizo que la comida escasease y que muchas personas muriesen de hambre.
Este conflicto tuvo lugar cuando la Rusia ortodoxa se expandió hacia el mar Negro en el siglo XVIII, lo que despertó la ira del Imperio otomano.
Los rusos encontraron resistencia por parte de la gente del Cáucaso septentrional. Los montañeros musulmanes caucásicos lucharon contra los rusos ortodoxos entre 1763 y 1864.
Tras el fracaso de la estrategia militar de los rusos, estos decidieron desahuciar a los caucásicos de sus casas. En 1864, casi tres millones de musulmanes adigueses, ubijos y abjasios fueron enviados al Imperio otomano en barcos, muchos de los cuales se hundieron.
La Revolución francesa poseía un profundo sentimiento anticatólico. Por lo tanto, uno de los objetivos de los revolucionarios era la descristianización del país.
Una de las medidas que impusieron fue la ley sobre la constitución civil del clero, la cual obligaba a todo el clero católico a jurar lealtad al Estado.
Esta guerra contra la dinastía imperial manchú empezó en 1850 y duró 14 años. El impulsor fue un revolucionario chino llamado Hong Xiuquan.
Si bien la disputa era mayoritariamente de carácter territorial, Hong Xiuquan aseguraba ser el hermano menor de Jesús y se propuso luchar contra los demonios confucianos (es decir, contra el Imperio manchú).
Xiuquan estableció el Reino Celestial Taiping, pero su rebelión se vio frustrada. Se cree que unos 20 millones de personas perdieron la vida durante el conflicto.
La Revolución bolchevique comenzó a manos de los socialistas (más adelante comunistas). Estos eran militantes ateos y, como tales, querían abolir la religión, sobre todo la Iglesia ortodoxa rusa.
Aunque la religión nunca llegó a prohibirse, la URSS atacó a varias comunidades religiosas que estaban ligadas al régimen zarista. Se cree que unos 30 millones de personas murieron durante la Gran Purga de entre 1936 y 1938.
El genocidio contra el pueblo armenio empezó en 1915 a manos del Imperio otomano y resultó en el exterminio de miles de armenios y su identidad.
Pero el holocausto armenio fue solo uno de las muchas acciones del Imperio otomano contra las comunidades cristianas que tuvieron lugar entre 1914 y 1923. Todo empezó con la masacre de las comunidades asirias cristianas y después con la de las armenias. Para 1918, 600.000 asirios y 1,5 millones de armenios habían perdido la vida.
La partición de la India tuvo lugar en 1917 y dividió el Imperio indio británico en lo que hoy en día son los estados modernos de India y Pakistán.
La decisión estuvo acompañada por los enfrentamientos violentos entre los hindúes, los musulmanes y los sijes. Por si esto fuera poco, también se produjo una migración en masa.
Se estima que alrededor de dos millones de personas fueron asesinadas y por lo menos 15 millones se vieron obligadas a desplazarse.
Sudán del Sur nació en 2011 a raíz de un sangriento conflicto entre los cristianos y animistas del sur y los musulmanes del norte.
Se cree que al menos dos millones de personas murieron en el conflicto y cientos de miles se vieron obligadas a desplazarse.
La guerra civil siria estalló en 2011 como consecuencia de la Primavera Árabe de 2010. La oposición del presidente sirio Bashar al-Ásad estaba compuesta por islamistas radicales como el Estado Islámico, entre otros.
La guerra se extendió hasta Irak, donde el Estado Islámico la emprendió contra los grupos minoritarios como los yazidíes y los asirios cristianos. Muchos turcomanos chiitas también han sido víctimas de la violencia de este grupo extremista.
Se cree que cerca de 5000 yazidíes han sido asesinados y 6000 esclavizados. Unos 400.000 se han visto obligados a abandonar sus hogares.
Fuentes: (Grunge)
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Mucha gente ha muerto por su religión (o la de otros)
ESTILO DE VIDA Guerras
Durante miles de años, la religión se ha esgrimido como argumento para declarar innumerables guerras. Imponer creencias por la fuerza parece una brutalidad, pero es algo que los humanos llevamos haciendo desde el principio de los tiempos. Desde las diferentes confesiones del cristianismo peleándose entre ellas hasta la persecución de los musulmanes, cristianos y judíos (entre otros), la historia está teñida con la sangre de las víctimas de los conflictos religiosos. Si quieres saber cuáles han sido algunos de los más terribles, ¡sigue leyendo!