Ya en 1914, los militares empezaron a utilizar la época navideña para fines propagandísticos. Esta postal de Múnich muestra un árbol de Navidad decorado con cruces militares.
Siete años más tarde, Hitler era nombrado líder del partido nacionalsocialista en una cervecería de Múnich. Aprovechando la ocasión, dio un discurso de Navidad profundamente antisemita delante de unos 4000 adeptos.
Aunque en la Alemania nazi estaba permitido celebrar la Navidad, el régimen aprovechaba la ocasión para promover su ideología antisemita de varias maneras.
Tras la llegada al poder de Hitler en 1933, los nazis intentaron acabar con la Navidad. Los orígenes judíos de Jesús y la conmemoración de su nacimiento como el mesías hacían que esta celebración fuese incompatible con la ideología nacionalsocialista. En la imagen se ve a varios oficiales nazis saludando a Hitler el día de Nochebuena en la cervecería Löwenbräukeller de Múnich.
A medida que el partido nazi iba ganando adeptos, hubo varios intentos de "nazificar" la Navidad. Hitler quería cambiar la forma en que los alemanes celebraban esta festividad, pero no era una tarea fácil.
Alemania era una nación profundamente cristiana. Fue aquí donde se forjaron muchas de las tradiciones de Yule, como los calendarios de adviento, los árboles de navidad y los famosos mercados navideños.
Los nazis sabían que iba a ser imposible erradicar la Navidad, por lo que optaron por cambiarla.
Los nazis creían que si redefinían las tradiciones familiares y creaban nuevos símbolos y rituales, podían acabar con los aspectos de la Navidad que eran contrarios a la doctrina del partido.
Al principio, los nazis optaron por apropiarse de la festividad. Los miembros del partido patrocinaban las celebraciones navideñas y aparecían al lado de María y José en las recreaciones del belén. En la imagen se ve a Joseph Goebbels, el ministro de propaganda del partido nazi, de la mano de su hija Helga al lado de gente disfrazada en la inauguración del mercado de Navidad de Lustgarten (Berlín) el 8 de diciembre de 1935.
En un gesto cínico para intentar que la gente vinculase el nacionalsocialismo con la Navidad, los nazis crearon la campaña Winterhilfwerke, una llamada a la donación para poder financiar labores de caridad supervisadas por la organización Bienestar social nacionalsocialista (NSV por sus siglas en alemán). En la imagen se ve a una familia de clase obrera recibiendo paquetes de Navidad de parte de miembros del NSV.
Los miembros más desfavorecidos de la sociedad alemana agradecían estos regalos. Por lo general, los hogares pobres no podían permitirse celebrar la Navidad por todo lo alto, de ahí que los nazis viesen en ellos la oportunidad perfecta para venderse como un partido caritativo.
La campaña Winterhilfwerke se fundó a principios de la Gran Depresión. Los miembros del partido y las juventudes nazis se dedicaron a recaudar dinero en nombre del NSV.
Las Juventudes Hitlerianas tenían que hacer regalos manuales para la gente de a pie y los militares.
Las labores del Reichsarbeitsdienst (trabajo de servicio del Reich) incluían la fabricación de juguetes navideños.
En la imagen se muestra a una miembro de la Liga de Muchachas Alemanas empaquetando regalos para los niños que contaban con el apoyo del NSV.
Como agradecimiento por su lealtad, los líderes del partido nazi también recibían regalos de Navidad. En la foto se ve cómo Hermann Göring y su mujer Emmy reciben obsequios navideños de parte de la Liga de Muchachas Alemanas.
Las fiestas navideñas que en teoría se celebraban para los niños necesitados en realidad eran la excusa perfecta para promover la agenda nazi. En la imagen se ve a Goebbels dando un discurso en Berlín rodeado de árboles de Navidad.
Sin embargo, la campaña navideña no llegó a calar lo suficiente y la gente siguió viendo la Navidad como una festividad cristiana. Por lo tanto, los nazis tuvieron que recurrir a otras medidas.
Los nazis empezaron a difundir la idea de que la Navidad era en realidad una festividad alemana de origen pagano que solía celebrar la supuesta herencia de la raza aria. Incluso intentaron cambiar la fecha de la Navidad al día del solsticio de invierno y redefinir la figura de San Nicolás como Wotan (Odín), la antigua deidad germánica.
Uno de los gestos más descarados de los nazis fue cambiar la letra del famoso villancico "Noche de paz, noche de amor" para que no hubiese referencias a Dios, Jesús o la religión. Además, el primer verso se modificó para que fuese una alabanza a Hitler.
En muchos hogares, la decoración navideña tradicional fue sustituida por símbolos del régimen nazi. Los adornos a menudo llevaban grabada el águila con la esvástica.
La imagen de Hitler era omnipresente. Su cara comenzó a venderse como adorno navideño, sobre todo para decorar los árboles.
Y, cómo no, la estrella que solía coronar el árbol empezó a reemplazarse por el símbolo más representativo de los nazis, la esvástica.
Los publicistas y fabricantes se beneficiaron enormemente de la nazificación de la Navidad. Los adornos con la esvástica y símbolos paganos se vendieron como churros.
En la imagen se ve a una familia alemana con dos hijos militares celebrando la Navidad en casa.
Mientras tanto, los militares en el campo de batalla celebraban la Navidad de la forma que podían. Los de mayor rango disfrutaban de un cierto confort navideño. Ejemplo de ello son los soldados que aparecen en la foto, celebrando la festividad con comida y bebida en su barracón.
En la imagen se aprecia una postal navideña de un soldado alemán enviada desde Rusia en 1942. El diseño combina una vela encendida con símbolos nazis.
En 1944, cuando Alemania estaba perdiendo la guerra, los nazis dejaron de esforzarse tanto por cambiar la Navidad. Por ejemplo, las amas de casa ya no tenían la obligación de hacer galletas de jengibre con forma de esvástica, sino que podían volver a prepararlas de la manera tradicional.
Tras todos los esfuerzos del partido nazi por acabar con la Navidad, solo hubo una cosa que sobrevivió al final del Tercer Reich: el villancico de Hans Baumann Hohe Nacht der klaren Sterne (la noche de las estrellas claras). Este se prohibió en 1945 por tratarse de propaganda nazi, pero muchas familias siguieron cantándolo hasta los años 50.
Fuentes: (U.S. News & World Report) (Smithsonian Magazine) (Facing History and Ourselves)
Ver también: Así era la Navidad en la era victoriana
Cómo el régimen nazi intentó transformar la Navidad
Los nazis intentaron rescribir una de las mayores festividades del mundo
ESTILO DE VIDA Historia
El auge del nacionalsocialismo en la Alemania de los años 20 y el consecuente régimen dictatorial de Adolf Hitler hicieron que los nazis quisieran transformar el país de arriba abajo para que este reflejase su retorcida ideología política y cultural. Aunque sus terribles prácticas son más que conocidas, lo que pocos saben es que también intentaron acabar con la Navidad. Los nazis la consideraban una festividad fantasiosa que debía prohibirse, por lo que quisieron cambiarla por una celebración neopagana repleta de simbolismo nacionalsocialista y propaganda antisemita. Si quieres saberlo todo sobre este capítulo de la historia, ¡sigue leyendo!