Anima a los pájaros a acudir a tu jardín proporcionándoles sustento. Puedes construir un reposadero-comedero y ofrecerles aperitivos suculentos con los que se sentirán atraídos cada día a tu patio trasero. Por supuesto, limpia el comedero a diario para evitar la propagación de enfermedades.
Las semillas de cardo son ricas en grasa y a los pinzones les encanta. Los gorriones domésticos, por otra parte, aman las semillas de girasol. Los gusanos de la harina son una delicia en primavera, cuando las aves están ocupadas buscando insectos para alimentar a sus crías. Las migas de pan también son una de las meriendas favoritas de los pájaros.
¿Te encantan los erizos? Estos preciosos mamíferos suelen tener hábitos nocturnos y se dedican a explorar los alrededores tras el anochecer. Para que se acerquen a tu jardín debes abrir primero un camino. ¿Acaso crees que pueden saltarse la valla?
Puedes animar a estas simpáticas criaturas a venir a tu jardín abriendo un corredor natural: un agujero en la valla o incluso un túnel bastarán.
Ayuda a las abejas solitarias a encontrar un hogar. Ellas crearán sus propios nidos en túneles de madera seca y tierra dura.
Toma una botella de plástico grande, corta el extremo y llénalo con una caña de bambú. ¡Ya tienes un hotel de cinco estrellas! También puedes optar por perforar varios agujeros profundos en un tronco y dejar que las abejas hagan su trabajo. ¡Recuerda que a las abejas les gusta el sol!
Solemos cortar el césped y podar las hojas y flores muertas para que nuestro jardín luzca impecable. No obstante, si resistes esta tentación podrás observar como cada vez más mamíferos se dedican a pasear por tu patio.
Deja que crezcan partes del césped y que las flores muertas favorezcan la germinación de nuevas plantas. Las aves como los jilgueros apreciarán también todas esas semillas.
Si estás pensando seriamente en convertir tu jardín en un lugar lleno de vida, una casita para pájaros es la mejor elección.
Dependiendo del tamaño de tu jardín puedes considerar colocar una casita, dos o incluso tres en cada árbol. ¿No tienes jardín? Puedes atornillar la casita a tu pared, lo más alto del suelo posible.
La maleza densa y las grandes extensiones de hierba animan a los erizos a anidar.
Tu adorable vecino el erizo se quedará en tu jardín si encuentra caracoles, babosas y otros bichos de los que alimentarse.
¿Alguna vez pensaste en crear un estanque en tu jardín? Aparte de proporcionarle un hogar a decenas de peces podrás atraer a ranas, tritones y libélulas. De hecho, un estanque ofrece también un lugar para beber y bañarse a diversos animales.
Crear un estanque no tiene que salir caro ni ser complejo. Entierra una bañera vieja en el suelo y ya tendrás la base de un precioso estanque. Te aconsejamos leer más sobre la materia en internet para aprender a oxigenar el agua y a evitar fugas.
Las ranas aman el agua, aunque también requieren de condiciones húmedas y de mucha sombra para mantener su piel en óptimas condiciones. Los sapos también aprecian los lugares húmedos y protegidos.
Puedes darle un hogar a los sapos cavando un agujero estrecho en el suelo e introduciendo una mezcla de tierra, escombros, hojas y ramitas. Este agujero debe tener al menos 30 cm de profundidad, de forma que los anfibios puedan crear su laberinto subterráneo.
Los insectos resultan esenciales en el cuidado de las plantas y desempeñan funciones muy importantes en tu jardín. No te deshagas de los bichos: fomenta su presencia construyendo un buen hábitat para ellos.
Paletas de madera, ladrillos viejos, mampostería rota, ramitas, paja y heno son algunos de los objetos y materiales que puedes usar para construir un buen hogar para los insectos. Recuerda que debes cubrir todo con tejas viejas para que este particular hotel de bichos se mantenga seco.
Las paredes de tu jardín no tienen por qué ser aburridas. Puedes cultivar plantas trepadoras como la hiedra o la madreselva, por ejemplo, para darle un aspecto fantástico a tu patio.
Llenar el jardín de hojas atraerá a aún más animales a tu jardín.
Puedes rematar tu jardín con un árbol o un arbusto que produzca frutas o bayas, las cuales supondrán una rica fuente de alimento tanto para los insectos como para los pájaros.
Los árboles y los arbustos también proporcionan una protección muy valiosa para los animales más pequeños.
Las flores no solo mejoran el atractivo estético de tu jardín, sino que también suponen una importantísima fuente de polen y néctar para las abejas y las mariposas.
No tires todas esas cáscaras que no necesitas en la cocina. Los restos crudos de verduras y fruta son el abono ideal para tu jardín y también atraen a una gran cantidad de animales silvestres.
Deposita todos tus restos en un contenedor de compost de jardín y mantenlo ahí hasta que se descompongan.
No solo las aves aprecian un lugar seguro para dormir y criar una familia. A los murciélagos también les gusta habitar en un refugio que les ofrezca protección.
Las casitas de murciélagos deben colocarse en una posición protegida, como debajo de las tejas de una casa o en el tronco de un árbol grande, preferiblemente lejos de las luces brillantes.
Puedes crear una pila de troncos en un área con bastante sombra para proporcionar un hábitat maravilloso para todo tipo de mamíferos pequeños, anfibios e insectos.
Recuerda que debes usar madera natural y sin pintura ni productos artificiales. De hecho, una superficie natural también favorecerá la proliferación de hongos.
¡Explora esta galería y descubre cómo puedes crear un refugio de vida silvestre en tu propio patio trasero!
Del jardín al santuario: cómo convertir tu espacio verde en una reserva natural
¿Quieres oír el canto de los pájaros en tu jardín?
ESTILO DE VIDA Naturaleza
El atractivo de un jardín se extiende más allá de la belleza de sus plantas, dependiendo también de la riqueza de la vida silvestre que habita en él. ¿Qué puede relajar más que escuchar el cantar de los pajarillos al amanecer? ¿O el sonido de los grillos? Sin embargo, ¿qué podemos hacer para fomentar la biodiversidad y atraer a más aves, mamíferos e insectos a nuestro jardín?
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