A veces lo único que se interpone entre nosotros y la felicidad somos nosotros mismos. Las relaciones pueden ser difíciles y el autosabotaje no siempre es fácil de reconocer en este contexto. Cuando ocurre, suele provenir de problemas relacionados con la inseguridad, la comunicación y la confianza. Además, es probable que se trate de algo con lo que llevas lidiando mucho tiempo. Aprender a detectarlo puede ayudarte a superarlo y a afianzar tu relación. Si quieres saber más, ¡haz clic para seguir leyendo!
La infidelidad no siempre gira en torno a la lujuria. Una persona puede engañar a otra para poner fin a la relación, ya sea de forma consciente o inconsciente, sobre todo si no se siente merecedora de su pareja o del amor que esta le da.
La falta de compromiso ocurre cuando la relación progresa y sabes lo que la otra persona significa para ti, pero no lo verbalizas ni te permites sentir algo más profundo.
El rencor es un signo de sabotaje muy común que a menudo surge de la propia inseguridad y sensación de inferioridad.
No hablar con claridad o abiertamente puede ser muy perjudicial para la relación.
Dar por sentado los sentimientos de la otra persona o creer que te entenderá sin palabras es la principal causa de malentendidos en una relación.
La pasividad-agresividad puede provenir de la incomodidad o el miedo a la confrontación. Esto también da pie a la confusión y los malentendidos dentro de la pareja.
La gratitud es un factor importante de cara a la longevidad de la relación. No dar las gracias, ya sea de forma consciente o inconsciente, hace que la otra persona sienta que sus esfuerzos son en vano.
Esperar cosas imposibles de tu pareja es otra forma de garantizar el fracaso de la relación, ya que cuando sea incapaz de cumplir tus expectativas, creerás que la relación no funciona.
Si te cuesta abrirte emocionalmente, a tu pareja le costará conectar contigo a un nivel más profundo. Esto puede dar pie a la soledad y la falta de intimidad.
El autosabotaje en una relación puede ser abusivo, sobre todo si hay luz de gas, manipulación, entrometimiento y violencia física de por medio.
Tener una actitud negativa y quejarse constantemente agota a cualquiera. Recuerda que centrarte en los aspectos positivos es tan fácil como dejarse llevar por los malos.
Si sientes que tienes que justificarte constantemente o que tu pareja siempre espera lo peor de ti, no querrás estar con ella por mucho tiempo. En una relación sana, tu pareja no tiene que luchar por ganarse tu confianza.
Reconocer los errores es esencial en cualquier relación, pero querer tener razón todo el tiempo solo hará que acabes solo.
La intimidad es crucial en una relación sana. Si empiezas a evitar las conversaciones importantes, puede que estés saboteando la relación.
Si te pasas el día hablando o quejándote de tu ex, la persona con la que estés ahora se llevará una mala impresión. ¡Es hora de pasar página!
Si tienes problemas de autoestima, es hora de buscar ayuda. ¡Tus problemas no son responsabilidad de tu pareja!
El romance no tiene por qué acabar solo porque llevéis mucho tiempo juntos. Cuidar de una relación implica mantener viva la llama y hacer que tu pareja se sienta querida.
Esto suele ocurrir cuando una persona ha tenido experiencias previas negativas. Como resultado, puede que no te consideres merecedor de tu pareja o que creas que algo no anda bien.
Participar en los intereses de tu pareja está muy bien... Hasta que confiesas que los detestas. Fingir ser alguien que no eres es agotador y solo sirve para engañar a quienes te rodean.
Es importante sacar tiempo para estar con tu pareja y forjar una buena dinámica.
Centrarte en los defectos de tu pareja y ser incapaz de ver sus virtudes es muy preocupante, ya que significa que estás buscando excusas para distanciarte de ella.
Puede que quieras pasar más tiempo a solas pero que no lo digas por miedo o inseguridad. Esto puede hacer que le acabes guardándole rencor a tu pareja o que te muestres pasivo-agresivo con ella. Lo mejor es hablar siempre sin tapujos.
Tendemos a esperar que las cosas siempre salgan bien, pero si te sientes decepcionado, lo mejor es hablarlo con tu pareja y no desaparecer de repente.
Una gran señal de autosabotaje es volcar toda tu energía en el trabajo, las aficiones o las otras personas de tu vida antes que en tu pareja.
Es fácil pasar por alto a tu pareja, pero hacerlo es una forma de sabotear la relación.
Si no sueles llegar a casa a la hora que dices que lo harás o no sacas tiempo para estar con tu pareja cuando habías prometido hacerlo solo conseguirás que la otra persona te acabe guardando rencor.
Negarte a hablar con tu pareja porque estás enfadado o porque quieres enseñarle una lección es un gesto extremadamente tóxico y perjudicial para la relación.
Aunque no existe una causa universal, los comportamientos aprendidos, el estilo de apego o las experiencias pasadas son factores que suelen dar pie al autosabotaje.
Superar las causas subyacentes del autosabotaje es el primer paso pasar eliminar estos comportamientos, ¡así que no dudes en buscar ayuda profesional!
Fuentes: (Psych Central) (Insider) (Verywell Mind)
No te pierdas: Qué hacer cuando ya no eres feliz con tu pareja
¿Estás saboteando tu propia relación?
Te contamos cómo dejar de hacerlo
ESTILO DE VIDA Comportamiento
A veces lo único que se interpone entre nosotros y la felicidad somos nosotros mismos. Las relaciones pueden ser difíciles y el autosabotaje no siempre es fácil de reconocer en este contexto. Cuando ocurre, suele provenir de problemas relacionados con la inseguridad, la comunicación y la confianza. Además, es probable que se trate de algo con lo que llevas lidiando mucho tiempo. Aprender a detectarlo puede ayudarte a superarlo y a afianzar tu relación. Si quieres saber más, ¡haz clic para seguir leyendo!