Afortunadamente, la sociedad ha avanzado bastante en lo que a positividad corporal se refiere. Poco a poco, las personas están aprendiendo a escuchar a su cuerpo y a tratarlo con respeto. Sin embargo, aún nos queda mucho trabajo por delante para desprendernos de las actitudes y comportamientos adquiridos que nos afectan a diario. Si quieres saber cómo sentirte más cómodo con tu cuerpo hoy mismo, ¡atento a estos consejos!
Si sientes la tentación de hacer cambios drásticos para lograr una figura "ideal", ¡resiste! Las dietas radicales casi nunca funcionan y solo harán que te sientas peor.
Recuerda que beber solo batidos durante tes semanas o dejar el azúcar por completo no es ni realista ni sensato.
Cuando te vistas, es importante que escojas la ropa teniendo en cuenta cómo es tu cuerpo. ¡No tiene nada malo!
Con esto no estamos queriendo decir que no puedas inspirarte en otras personas, pero el punto de partida siempre debería ser acentuar tus propias virtudes.
Aunque sea más fácil decirlo que hacerlo, asegúrate de descansar lo suficiente. Es imposible sentirte cómodo con tu cuerpo si estás agotado y te faltan horas de sueño.
Puede que no puedas o no te apetezca echarte una siesta por la tarde. Aun así, intenta establecer una rutina que te permita tener momentos de descanso a lo largo del día.
¡Tampoco hay nada de malo en llevar ropa colorida! De hecho, está demostrado que ponerse prendas llamativas mejora nuestro estado de ánimo.
Vístete con colores que te hagan sentir bien. Si no estás seguro de cuáles son, ¡ve probando!
Puede que te cueste dejar a un lado las inseguridades, pero si no lo haces por ti, al menos hazlo por el planeta. Una de las principales razones por las que compramos más de la cuenta es porque nos hacemos con prendas que nos gustaría que nos sentasen bien, pero no es así.
Cuando vayas de tiendas, haz un esfuerzo por comprar aquello que te siente y te haga sentir bien. Ignora las tallas y céntrate en lo que mejor te quede.
Sabemos que esto también es más fácil decirlo que hacerlo, pero intenta dejar a un lado las inseguridades relacionadas con el deporte. Hacer ejercicio en público puede ser intimidante, pero si no lo haces, las cosas solo irán a peor.
Si vas a una clase por primera vez y tienes ansiedad, díselo al instructor. Ser abiertamente vulnerable puede hacer que la situación no parezca tan abrumadora.
Si de verdad quieres cambiar tu cuerpo por algún motivo, asegúrate de que los pasos que des sean pequeños y fáciles. Crea hábitos que no te cueste mantener.
Busca consejo profesional personalizado y no te olvides de que no todos tenemos los mismos ideales ni queremos tener el mismo aspecto.
Otro buen consejo es vestirte de forma acorde a tu personalidad y no tanto a tu forma física.
Nuestro estilo debería ser una forma de expresar nuestras aspiraciones y puntos fuertes y no los ideales de la sociedad.
Sabemos que esto puede ser un poco contradictorio con lo que comentábamos antes de la moda sostenible, pero si crees que la ropa de deporte adecuada va a animarte a hacer ejercicio, ¡adelante!
Al fin y al cabo, somos más propensos a movernos si nos podemos prendas que nos hacen sentir bien con nosotros mismos.
Si hay cuentas que te hacen sentir mal contigo mismo, deja de seguirlas o limita las notificaciones para no exponerte tanto a ellas.
También puedes empezar a seguir cuentas que te ayuden a mejorar tu autoestima y a centrarte en tener una idea más positiva de tu cuerpo.
Si puedes, no te dejes llevar por los números en lo que a figura, peso y tamaño se refiere. No te preocupes por las básculas ni por el número de calorías que quemes.
Céntrate en aprender a escuchar a tu cuerpo. Come cuando tengas hambre, muévete de forma que te sientas bien y descansa lo suficiente.
Si confías en tus capacidades y te conoces lo suficiente como para apreciar tus puntos fuertes, se notará.
Céntrate en lo que te gusta de ti. Si no sabes por dónde empezar, pregúntale a tus seres queridos, quienes sin duda te darán una lista bien larga.
Si la positividad corporal te cuesta, empieza por practicar la neutralidad. Al fin y al cabo, ¡siempre es mejor que dejarse llevar por la negatividad!
Empieza por darle las gracias a tu cuerpo por todo lo que hace. "Me siento agradecido por tener un cuerpo que me permite seguir haciendo deporte", por ejemplo.
También es buena idea reconocer que el mundo está lleno de cuerpo diferentes y que el tuyo es uno de ellos.
Compararse con los demás es fácil, pero lo ideal es saber apreciar el cuerpo de los demás sin querer cambiar el tuyo.
Por último, ten en cuenta que habrá días en los que la positividad brille por su ausencia. Todos pasamos por momentos en los que nos sentimos inseguros por alguna cosa.
El objetivo principal es practicar la positividad corporal la mayor parte del tiempo. No seas duro contigo mismo y recuerda que es un proceso que requiere tiempo y esfuerzo.
Fuentes: (The Guardian) (Forbes)
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¡Puedes poner estos consejos en práctica ya mismo!
ESTILO DE VIDA Imagen corporal
Afortunadamente, la sociedad ha avanzado bastante en lo que a positividad corporal se refiere. Poco a poco, las personas están aprendiendo a escuchar a su cuerpo y a tratarlo con respeto. Sin embargo, aún nos queda mucho trabajo por delante para desprendernos de las actitudes y comportamientos adquiridos que nos afectan a diario. Si quieres saber cómo sentirte más cómodo con tu cuerpo hoy mismo, ¡atento a estos consejos!