El primer paso es reconocer lo que sientes y permitirte estar triste. Evitar estos sentimientos no hará que desaparezcan.
Aun así, es importante que no centres en estos sentimientos durante demasiado tiempo. Apaga la música triste tras unas pocas canciones y sal a dar un paseo. No necesitas procesarlo todo a la primera.
Una buena forma de despejar la mente es escribir lo que sientes. Invierte en un cuaderno bonito y plasma tus sentimientos en papel.
El rechazo familiar es una experiencia muy dura que puede dar pie a un amplio abanico de emociones como la tristeza, el enfado y la conmoción. Escribir lo que sientes puede ayudarte a entenderlo.
Escribir un diario también puede ayudarte a reconocer patrones y a identificar desencadenantes. Asimismo, puede servirte para hacer un seguimiento de los días que te sientas especialmente triste y ver qué tienen en común.
Cuando te sientas especialmente mal, prueba a repetir afirmaciones positivas. Úsalas para recordarte a ti mismo que eres fuerte y que podrás salir de esta.
Intenta usar frases como "Merezco amor y respeto" o "Soy una persona hermosa y talentosa". ¡Tú eliges!
Si no estás acostumbrado a hacerlo, puede que al principio te cueste creer estas palabras. No desistas y tarde o temprano acabarás notando los resultados.
Aunque sea más fácil decirlo que hacerlo, intenta limitar los pensamientos negativos todo lo posible.
Por muy tentador que sea rumiarlos una y otra vez, es importante que no dejes que se apoderen de ti.
En cuanto te descubras a ti mismo entrando en espiral, intenta darle la vuelta a los pensamientos negativos y abordarlos desde un punto de vista más positivo.
Si puedes, dale la vuelta a la propia situación y búscale el lado positivo. Si tu familia no te acepta tal y como eres, puede que sea mejor que no forme parte de tu vida ahora mismo.
Sobre todo si has sufrido maltrato físico o mental por parte de uno o más familiares.
Si este es tu caso, recuerda que estás mejor solo que mal acompañado y que ahora tienes la oportunidad de rodearte de gente que sepa tratarte y quererte como es debido.
También es importante que saques tiempo para cuidarte. Para poder superar los sentimientos que te provoca el rechazo necesitas estar en buena forma, tanto física como mental.
Asegúrate de comer sano, de hacer ejercicio y de dormir. Incluso puedes explorar una nueva afición que te llene y enriquezca tu vida.
No recurras al alcohol o a las drogas. No te ayudarán a recuperarte y lo más probable es que solo empeoren las cosas.
Otro paso importante es forjar relaciones estrechas y significativas con otras personas. Recuerda que los amigos también pueden ser tu familia.
Rodéate de personas que te hagan sentir bien contigo mismo. Cuida de las relaciones sanas que ya tengas y no tengas miedo de conocer gente nueva.
Si estás buscando una buena forma de hacer amigos, prueba a ofrecerte como voluntario en algún proyecto local, a unirte a un club de lectura o a conocer gente por internet.
Si tu familia te rechaza, puede que te venga bien hablar del asunto con alguien en quien confíes.
Habla con un amigo o ve a su casa para contarle cómo te sientes. Pregúntale si tiene algún consejo o palabras de aliento para ti.
Si el miembro de la familia que te ha rechazado sigue poniéndose en contacto contigo para tratarte mal, es importante que pongas límites para dejarle claro que su comportamiento es inaceptable.
La próxima vez que haga algo para herirte o hundirte, respóndele con una frase contundente como "No puedo continuar con esta conversación si vas a seguir tratándome así".
Si no responde de forma respetuosa y cambia su actitud, puede que sea momento de limitar el contacto para proteger tu propio bienestar.
Por último pero no por ello menos importante, plantéate ir a terapia para aprender a gestionar los sentimientos y descubrir estrategias específicas que te ayuden a recuperarte y pasar página.
Al contrario que tus amigos y familiares de confianza, un psicólogo que no te conozca podrá proporcionarte una perspectiva externa e imparcial de la situación.
Busca un psicólogo especializado en problemas familiares y no te preocupes si tardas un tiempo en dar con el adecuado.
Fuentes: (WikiHow)
No te pierdas: Estos son los principales rasgos de una familia sana
Rechazo familiar: cómo encontrar apoyo y seguir adelante
Aquí te dejamos varias estrategias para gestionar esta difícil situación
ESTILO DE VIDA Psicología
El rechazo familiar es una de las cosas más duras a las que alguien puede tener que enfrentarse en esta vida. Todos necesitamos tener gente a nuestro alrededor en la que podamos apoyarnos, sobre todo en los momentos difíciles. Por lo tanto, no contar con este cariño puede dar pie a todo tipo de emociones negativas como la tristeza, el miedo y el arrepentimiento. Aunque no todos pasamos por ello, se trata de un problema más común de lo que se piensa. Si te ves reflejado en esta situación, no estás solo y, de hecho, hay varias cosas que puedes hacer para llevarla un poco mejor. Si quieres saber cómo gestionar el rechazo familiar de forma saludable, ¡haz clic para seguir leyendo!