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Te cambia la vida - Tener un hijo es, quizás, el momento cumbre de la vida de muchas personas. Sin embargo, puede ser también un poco abrumador.
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Estrés - Tener hijos añade un estrés obvio a la relación, tanto a nivel individual como de pareja.
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Frialdad - A veces, la llegada de un bebé provoca que sus padres se distancien y dejen de tratarse de la misma forma cariñosa de siempre. A continuación te ofrecemos algunos consejos para evitarlo.
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Novatos - Los padres primerizos no tienen ninguna referencia o pista sobre cómo lidiar con el estrés de un recién nacido. Es bueno hablar con otras parejas que hayan pasado por lo mismo antes, comenzando por los propios abuelos del bebé.
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4 / 30 Fotos
Satisfacción en pareja - La satisfacción de la pareja suele caer en picado tras el nacimiento del bebé. Las parejas estarán más estresadas y, por consiguiente, más tristes. No penséis que es algo que solo pasa en vuestra pareja.
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Le pasa a todos - No creas que este problema solo afecta a tu pareja. El estrés de comenzar a formar una familia no depende de ningún factor social o cultural en particular.
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6 / 30 Fotos
¿De cuánto estrés estamos hablando? - Vamos a poner las cosas claras. ¿De cuánto estrés estamos hablando?
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Hablamos de menos tiempo de calidad - Las parejas pasan menos tiempo juntas, realizando actividades románticas. El cuidado del bebé se convierte en la primera (y a veces casi única) prioridad.
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Menos tiempo de calidad - Menos tiempo en pareja significa menos conexión, menos oportunidades de estrechar lazos y de relajaros juntos.
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Menos tiempo para uno mismo
- Como individuos, los padres tendrán menos tiempo para sí mismos. El bebé necesitará toda la atención de sus progenitores para cubrir sus necesidades.
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Responsabilidades - Las tareas domésticas y de cuidados deben dividirse entre la pareja. Sin embargo, con mucha frecuencia, uno de los progenitores termina adoptando más responsabilidades en dichas tareas que el otro.
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11 / 30 Fotos
La negociación - Esto puede llevar a la sensación de que estar en pareja es negociar qué tareas debe realizar cada uno, como si la unión se mantuviese por motivos meramente funcionales.
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12 / 30 Fotos
Expectativas y realidad - El resentimiento puede aparecer cuando uno de los progenitores siente que está trabajando más que el otro.
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13 / 30 Fotos
Las cosas pueden empeorar - Si existen problemas médicos de por medio, tanto físicos como mentales, el sentimiento de indiferencia y de odio puede aumentar.
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Las cosas pueden empeorar - Además, la situación también puede empeorar si uno de los progenitores tiene problemas financieros o carece de apoyo emocional.
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¡Se acabó el pesimismo! - A continuación vamos a enfocarnos en los aspectos positivos de la llegada del bebé: aquellos en los que las parejas se tienen que enfocar.
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Tasas de divorcio que disminuyen - A pesar de los nuevos aprietos para la pareja, esta tiene menos probabilidades de divorciarse tras tener un hijo.
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17 / 30 Fotos
Red de apoyo - Es realmente importante tener una red de apoyo cerca de la pareja. Hablamos de familia, amigos e incluso vecinos que puedan echar una mano cada vez que lo necesites. A fin de cuentas, todos necesitamos un poco de tiempo.
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18 / 30 Fotos
Cuídate - Recuerda no abandonarte cuando tengas un hijo. La llegada del bebé resulta abrumadora en un principio, pero descuidar tu salud (física y mental) solo hará que la situación empeore.
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19 / 30 Fotos
Cuídate - Intenta dormir lo suficiente. Ya sabemos lo difícil que es, especialmente durante el primer año de vida del bebé, pero es importante que definas estrategias para que puedas disfrutar de tus descansos.
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20 / 30 Fotos
Cuídate - Come una dieta variada y balanceada, especialmente si eres la madre y estás dando el pecho. Ingerir los nutrientes y vitaminas necesarios te hará bien a ti y a tu bebé.
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21 / 30 Fotos
Haz ejercicio - Sabemos que te sentirás destrozado/a durante los primeros meses de vida de tu hijo. Sin embargo, debes recordar que el ejercicio es una parte vital de la salud. Además, ayuda a mantener encendida la llama sexual de la pareja.
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Nunca dejéis de ser amantes
- Sabemos que es más fácil decirlo que hacerlo y, aun así, tenemos que escribirlo en esta galería. No mantener el trato romántico en la pareja, además del sexo, acabará distanciándonos.
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23 / 30 Fotos
¡Hay que reír! - Intenta tratar los pequeños problemas con humor. Sabemos que tener un bebé no es un chiste, pero mantener un ambiente distendido ayudará a que la alegría reine en la casa.
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Serás menos egoísta - Tener un hijo aumentará tus niveles de altruismo. Es difícil que una persona sepa realmente lo que es dar si no ha tenido un hijo.
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Equilibrio - La clave es el equilibrio entre las actividades con los niños y el tiempo para ti mismo/a. Una vez más, por supuesto, es más fácil decirlo que hacerlo.
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26 / 30 Fotos
Aceptarlo para mejorar - La reducción de la satisfacción en pareja es normal. Acéptalo para así poder trabajar para mejorarlo. Recuerda que se trata únicamente de una fase.
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27 / 30 Fotos
No te alejes - Concéntrate en la gratitud y disfruta del momento. Además, permítete a ti mismo/a y a tu pareja conectar con las pequeñas cosas del día a día, como una sonrisa o un beso.
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28 / 30 Fotos
Una mentalidad positiva - Todo habrá merecido la pena. Recuerda que tus padres también habrán pasado, con toda probabilidad, por las mismas dificultades. Lo mejor está por llegar.
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Te cambia la vida - Tener un hijo es, quizás, el momento cumbre de la vida de muchas personas. Sin embargo, puede ser también un poco abrumador.
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Estrés - Tener hijos añade un estrés obvio a la relación, tanto a nivel individual como de pareja.
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Frialdad - A veces, la llegada de un bebé provoca que sus padres se distancien y dejen de tratarse de la misma forma cariñosa de siempre. A continuación te ofrecemos algunos consejos para evitarlo.
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Novatos - Los padres primerizos no tienen ninguna referencia o pista sobre cómo lidiar con el estrés de un recién nacido. Es bueno hablar con otras parejas que hayan pasado por lo mismo antes, comenzando por los propios abuelos del bebé.
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Satisfacción en pareja - La satisfacción de la pareja suele caer en picado tras el nacimiento del bebé. Las parejas estarán más estresadas y, por consiguiente, más tristes. No penséis que es algo que solo pasa en vuestra pareja.
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Le pasa a todos - No creas que este problema solo afecta a tu pareja. El estrés de comenzar a formar una familia no depende de ningún factor social o cultural en particular.
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¿De cuánto estrés estamos hablando? - Vamos a poner las cosas claras. ¿De cuánto estrés estamos hablando?
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Hablamos de menos tiempo de calidad - Las parejas pasan menos tiempo juntas, realizando actividades románticas. El cuidado del bebé se convierte en la primera (y a veces casi única) prioridad.
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Menos tiempo de calidad - Menos tiempo en pareja significa menos conexión, menos oportunidades de estrechar lazos y de relajaros juntos.
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Menos tiempo para uno mismo
- Como individuos, los padres tendrán menos tiempo para sí mismos. El bebé necesitará toda la atención de sus progenitores para cubrir sus necesidades.
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Responsabilidades - Las tareas domésticas y de cuidados deben dividirse entre la pareja. Sin embargo, con mucha frecuencia, uno de los progenitores termina adoptando más responsabilidades en dichas tareas que el otro.
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La negociación - Esto puede llevar a la sensación de que estar en pareja es negociar qué tareas debe realizar cada uno, como si la unión se mantuviese por motivos meramente funcionales.
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Expectativas y realidad - El resentimiento puede aparecer cuando uno de los progenitores siente que está trabajando más que el otro.
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Las cosas pueden empeorar - Si existen problemas médicos de por medio, tanto físicos como mentales, el sentimiento de indiferencia y de odio puede aumentar.
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Las cosas pueden empeorar - Además, la situación también puede empeorar si uno de los progenitores tiene problemas financieros o carece de apoyo emocional.
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¡Se acabó el pesimismo! - A continuación vamos a enfocarnos en los aspectos positivos de la llegada del bebé: aquellos en los que las parejas se tienen que enfocar.
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Tasas de divorcio que disminuyen - A pesar de los nuevos aprietos para la pareja, esta tiene menos probabilidades de divorciarse tras tener un hijo.
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Red de apoyo - Es realmente importante tener una red de apoyo cerca de la pareja. Hablamos de familia, amigos e incluso vecinos que puedan echar una mano cada vez que lo necesites. A fin de cuentas, todos necesitamos un poco de tiempo.
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Cuídate - Recuerda no abandonarte cuando tengas un hijo. La llegada del bebé resulta abrumadora en un principio, pero descuidar tu salud (física y mental) solo hará que la situación empeore.
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Cuídate - Intenta dormir lo suficiente. Ya sabemos lo difícil que es, especialmente durante el primer año de vida del bebé, pero es importante que definas estrategias para que puedas disfrutar de tus descansos.
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Cuídate - Come una dieta variada y balanceada, especialmente si eres la madre y estás dando el pecho. Ingerir los nutrientes y vitaminas necesarios te hará bien a ti y a tu bebé.
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Haz ejercicio - Sabemos que te sentirás destrozado/a durante los primeros meses de vida de tu hijo. Sin embargo, debes recordar que el ejercicio es una parte vital de la salud. Además, ayuda a mantener encendida la llama sexual de la pareja.
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Nunca dejéis de ser amantes
- Sabemos que es más fácil decirlo que hacerlo y, aun así, tenemos que escribirlo en esta galería. No mantener el trato romántico en la pareja, además del sexo, acabará distanciándonos.
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23 / 30 Fotos
¡Hay que reír! - Intenta tratar los pequeños problemas con humor. Sabemos que tener un bebé no es un chiste, pero mantener un ambiente distendido ayudará a que la alegría reine en la casa.
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Serás menos egoísta - Tener un hijo aumentará tus niveles de altruismo. Es difícil que una persona sepa realmente lo que es dar si no ha tenido un hijo.
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Equilibrio - La clave es el equilibrio entre las actividades con los niños y el tiempo para ti mismo/a. Una vez más, por supuesto, es más fácil decirlo que hacerlo.
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Aceptarlo para mejorar - La reducción de la satisfacción en pareja es normal. Acéptalo para así poder trabajar para mejorarlo. Recuerda que se trata únicamente de una fase.
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No te alejes - Concéntrate en la gratitud y disfruta del momento. Además, permítete a ti mismo/a y a tu pareja conectar con las pequeñas cosas del día a día, como una sonrisa o un beso.
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Una mentalidad positiva - Todo habrá merecido la pena. Recuerda que tus padres también habrán pasado, con toda probabilidad, por las mismas dificultades. Lo mejor está por llegar.
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Cómo mantener la pasión en tu relación después de tener hijos
¿Cuánto puede cambiar un bebé nuestra vida? ¿Qué podemos hacer al respecto?
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Tener un hijo cambia la vida de una pareja para siempre. Las cuentas que teníamos echadas para dos personas ya no salen cuando de ese dos pasamos al tres, pues las prioridades cambian, los niveles de estrés aumentan y, a veces, las parejas se distancian.
Si acabas de tener un hijo, sabes de lo que hablamos: la llegada de un bebé puede afectar a la relación.
Si bien es cierto que un pequeño une aún más a ciertas parejas, otras pueden resentirse y fracasar en su objetivo de ser felices.
No te preocupes, estamos aquí para aconsejarte y ayudaros a que vuestra nueva familia esté aún más unida y feliz. ¡Haz clic!
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