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Bagel de pavo y aguacate -

Un sándwich de toda la vida reinventado en forma de bagel. ¿A quién no le gusta la clásica combinación de aguacate, pavo, lechuga y tomate? ¡Éxito asegurado!

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Bagel de beicon, huevo y queso -

Este bagel es el desayuno perfecto: beicon, huevo y queso. ¡Una combinación ganadora para empezar el día con energía!

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Bagel de beicon, lechuga y tomate -

A veces, menos es más. Beicon crujiente, jugoso tomate y lechuga refrescante. ¿A que se te hace la boca agua solo de pensarlo?

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Bagel de ensalada de huevo -

Cremosa e intensa con una textura deliciosa: ¿a quién no le gusta una buena ensalada de huevo? Y si encima la combinas con lechuga crujiente y un buen bagel, ya no se puede pedir más.

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Bagel de salmón y queso crema -

Un bagel sofisticado pero fácil de preparar: unta queso crema y acompáñalo de salmón ahumado, unas rodajas de cebolla y alcaparras para darle un toque especial.

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Bagel de queso gratinado -

Puede que este sea uno de los bagels más fáciles de preparar del mundo entero. El queso gratinado combina con prácticamente cualquier cosa, ¡así que deja volar tu imaginación!

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Bagel de pizza -

La opción fácil es comprarlo precocinado, ¿pero y lo divertido y gratificante que es preparar este bagel en casa? Córtalo a la mitad y ponle salsa de tomate, queso y tus ingredientes preferidos por encima. ¡Mételo al horno unos minutos y listo!

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Bagel de atún y queso suizo -

No hay forma de comer este bagel con dignidad, ¿pero y lo rico que está? Rellénalo de ensalada de atún, salsa y queso suizo y déjate llevar por la sinfonía de sabores. Eso sí, acuérdate de tener una servilleta (o varias) a mano.

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Bagel de pastrami -

El pastrami mejora cualquier sándwich frío y los bagels no son una excepción. Ponle unas rodajas y acompáñalo de tus otros ingredientes preferidos para disfrutar de una comida rápida y deliciosa.

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Bagel al estilo italiano -

Este bagel es un acierto seguro. Rellénalo de pepperoni, salami, salsa boloñesa, lechuga y tomate para disfrutar de un pedacito de Italia sin salir de casa.

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Bagel de rosbif -

Al igual que el pastrami, el rosbif es todo un clásico entre los sándwiches fríos. Su sabor intenso y ahumado marida a la perfección con las semillas de sésamo del bagel. Acompáñalo de unos jalapeños y queso cheddar o un poco de queso crema y verduritas. ¡Como más te guste!

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Bagels dulces -

Si no te apetece mucho algo salado, no temas: ¡los bagels también pueden ser dulces! Úntalos de crema de cacao y avellana o mantequilla de cacahuete y rellénalos de tus acompañamientos preferidos para darle un final dulce a tu comida.

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Bagel de pepino y queso crema -

Este bagel es refrescante e ideal para hacer una pausa a media tarde. Tómate un respiro, ¡te lo mereces!

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Bagel de pesto, tomate y mozzarella -

Hay pocas combinaciones mejores que la del queso mozzarella, el tomate fresco y un buen pesto. Junta todos estos ingredientes y acompáñalos de tus especias italianas preferidas para disfrutar de un bagel que te dejará con una sonrisa en la cara.

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Bagel de huevo y aguacate -

Los bagels son un desayuno estupendo, así que si estás buscando ideas para abrir el apetito por la mañana, un relleno de huevo frito y aguacate es un acierto seguro.

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Bagel de granola y fruta -

Pero lo dicho, si no te convence lo salado, siempre puedes recurrir al dulce. ¿Qué te parece esta combinación de yogur griego, fruta fresca y granola? Échale un poco de miel por encima para darle un toque dulce y en menos de cinco minutos tendrás listo un desayuno delicioso y nutritivo. Para llevarlo al siguiente nivel, prueba a espolvorear un poco de canela y a utilizar un bagel con uvas pasas.

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Bagel de ensalada de pollo -

Una ensalada de pollo acompañada de lechuga y tomate entre dos mitades crujientes de bagel con semillas sésamo. ¿A que se te cae la baba?

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Bagel de queso y jamón -

Incluso el niño más exigente no le dice que no a un buen sándwich de jamón y queso. Sustituye el pan de molde por un buen bagel y sírvelo de merienda.

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Bagel de mermelada y mantequilla de cacahuete -

Esta combinación ganadora está aún más rica en un bagel bien crujiente. ¿A qué esperas para prepararlo?

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Bagel Benedict -

Utiliza el bagel como base y colócale encima los huevos escalfados y la salsa holandesa. ¡No hace falta salir de casa para disfrutar de un buen brunch!

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Bagel de albóndigas -

Te prometemos que la clásica combinación de albóndigas, marinara y mozzarella funciona igual de bien en un bagel. Y si quieres darle un toque especial, échale queso Asiago por encima. ¡No te arrepentirás!

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Bagel "Philly cheesesteak" -

Hay quienes dicen que los clásicos pierden su esencia si se reinventan, pero te aseguramos que esta combinación de tiras de carne, pimiento verde asado y queso provolone está igual de buena (o más) en un bagel.

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Bagel Reuben -

Carne de ternera, chucrut, queso suizo y aliño ruso. Estos son los cuatro pilares de un buen sándwich Reuben que, cómo no, está igual de delicioso entre dos mitades de bagel. ¡Ñam!

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Hamburguesa con pan de bagel -

Era cuestión de tiempo que alguien decidiese cambiar el pan de hamburguesa por un bagel. ¿Y sabes qué? ¡Funciona a la perfección! Anímate a innovar y déjate sorprender.

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Bagel de pepinillo y mantequilla de cacahuete -

De hecho, si eres muy fan de innovar en la cocina, quizá te atrevas con esta combinación poco convencional. Este bagel es salado, potente, crujiente y cremoso: ¡toda una montaña rusa para el paladar!

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Bagel de espinacas y alcachofa -

La receta que ha revolucionado las redes, pero esta vez en formato bagel. ¡No hay nada que el pan no pueda mejorar!

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Bagel de pollo y queso parmesano -

El queso parmesano está riquísimo por sí solo, pero si además lo acompañas de un pollo bien jugoso y un bagel crujiente, la mezcla es insuperable.

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Bagel de pastel de carne -

Si no sabes qué hacer con esas sobras de pastel de carne, ¡mételas en un bagel! Para darle un toque especial, asegúrate de tostar el pan y de añadirle un poco más de salsa y queso. ¡Que aproveche!

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Bagel arcoíris -

Los bagels arcoíris han revolucionado las redes sociales, ¡y como para no hacerlo! Son tan lindos que hasta da pena comerlos. La próxima vez que te apetezca innovar en la cocina, hazte con colorante alimentario y recrea esta divertidísima receta. ¡Te alegrará el día!

Fuentes: (Ashlee Marie) (Cooking Chew)

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