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Inmersión - Lo más importante que debes hacer es una inmersión tan profunda como puedas en el idioma que pretendes aprender. Si no puedes irte a vivir a algún lugar donde se hable esa lengua, intenta hablar y pensar siempre en ese idioma, además de ver películas, series, documentales o similares para hacer el oído.

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100 palabras - Los estudios demuestran que las 100 palabras más comunes de cualquier idioma representan el 50 % de la comunicación. Cuando sepas estas palabras, combínalas para poder mantener una conversación.

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Aplicación: diccionario - Descarga un diccionario en tu celular para encontrar más fácilmente las palabras que necesites a lo largo del día.

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Evita las clases en grupo - Normalmente, son la opción más económica, pero en las clases en grupo se pierde más tiempo, ya que cada uno aprende a su ritmo.

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Clases individuales - Si es posible, opta por clases individuales. Recibirás instrucciones personalizadas que te ayudarán a aprender más rápido y a resolver tus dificultades personales con el idioma.

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Estudia como es debido - En lugar de estudiar durante muchas horas de golpe, proponte estudiar de forma intensa durante períodos cortos cada día.

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Estudia como es debido - La mayoría de la gente no recuerda lo que aprendieron en las clases porque no hay suficiente repetición.

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Estudia como es debido - La repetición es una parte clave para aprender otro idioma. Utiliza el aprendizaje por repetición espaciada.

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Aprendizaje por repetición espaciada - El aprendizaje por repetición espaciada implica aumentar poco a poco los intervalos entre las sesiones de estudio para aprovechar la forma en la que la información se almacena en nuestra memoria. La aplicación Anki utiliza este método de aprendizaje.

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Pide ayuda - Pregúntale a la gente qué significa esa palabra que no sabes o cómo se dice aquello. La mayoría estamos abiertos a ayudar a gente que está claramente haciendo un esfuerzo por aprender nuestro idioma.

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Motivación - Antes de empezar a estudiar un nuevo idioma, define por qué razones quieres hacerlo. Así, sabiendo por qué estás invirtiendo tiempo y energía en aprender otra lengua, tendrás más motivación.

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Habla con tu mascota - Si tienes una mascota, practica hablando con ella en otro idioma. Si no tienes, habla en voz alta contigo mismo. No tiene nada de locura.

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Televisión - Ve películas y programas en el idioma en cuestión.

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Encuentra a un compañero - Además de encontrar hablantes nativos con los que hablar, encuentra a alguien que también esté aprendiendo para practicar y motivarte.

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Compañeros online - Los teléfonos inteligentes traen muchas aplicaciones para poner en contacto a hablantes de un idioma con otros de otro idioma que quieren aprender. ¡Aprovéchalas!

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Conversación - Hablar es la clave para aprender un nuevo idioma. Las horas de conversaciones extrañas y extenuantes te permitirán alcanzar un nivel avanzado.

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Escucha - Una de las partes más importantes de aprender un idioma es escuchar. Cuanto más te expongas a los sonidos, más fácil te resultará reproducirlos.

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Patrones de pronuncia - Descubre los patrones de pronunciación y palabras para maximizar la cantidad de palabras que aprendes y recuerdas.

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Aprender vocabulario - Cuando aprendas una palabra nueva, repítela varias veces y encuentra una forma de incorporarla a tus conversaciones o monólogos internos tanto como puedas, para asegurarte de que pasa a tu memoria a largo plazo.

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Fluidez vs. precisión - Cuando estamos aprendiendo un nuevo idioma, es más importante hablar lo mejor que puedas y no preocuparte demasiado de decirlo todo perfecto. Mejorarás con la práctica.

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Hora de estudio - Planifica tu tiempo de estudio teniendo en cuenta tus intereses. Hay muchas formas de exponerte al idioma: películas, músicas, podcasts, libros, videojuegos, etc.

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'¿Cómo se dice...?' - La frase más importante que vas a aprender será '¿Cómo se dice...?' Asegúrate de que la usas a menudo.

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Lee - La mejor forma de aprender vocabulario nuevo es leer. Esto incluso funciona con tu lengua materna. Agarra un libro y un diccionario de bolsillo y ponte manos a la obra.

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Márcate objetivos realistas - No seas exagerado. Ponte metas pequeñas y fáciles de alcanzar para mantenerte motivado y ver progresos.

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No seas tímido - No te cortes y no te preocupes por cometer errores. Es la única forma de aprender.

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Hasta que el cerebro explote - Cuando estés estudiando o hablando en ese idioma, asegúrate de aprovechar al máximo la experiencia y esfuérzate hasta que sientas que el cerebro te va a explotar.

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Piensa en el otro idioma - Proponte pensar en el idioma en cuestión, aunque sea durante períodos cortos o con frases básicas.

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Hazlo divertido - En lugar de sentarte en una clase o quedarte en casa pasmando ante un libro, prepara un proceso de aprendizaje divertido. Asiste a eventos celebrados en ese idioma y haz amigos que compartan tus intereses.

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Conversaciones en grupo - El proceso de aprendizaje de un idioma se divide en fases. Cuando puedas seguir a un grupo de hablantes nativos sin perderte e intervenir de vez en cuando en la conversación, sabrás que ya estás en una fase avanzada.

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