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Incentivos fiscales -

Si estás haciendo la declaración de la renta en conjunto con tu esposo/a, tendrás más beneficios fiscales y podrás ahorrarte un buen dinero.

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Más barato que un seguro de hogar -

Las parejas casadas suelen disfrutar de un seguro del hogar más barato, pues las compañías entienden que son más responsables.

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Ayudas para la crianza de los niños -

Si uno de los esposos debe dejar de trabajar para estar al cuidado de los niños, las ayudas gubernamentales serán una gran ventaja. No obstante, el gran requisito es estar casados.

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Una hipoteca más fácil de conseguir -

Con dos salarios y con vuestro estatus de casados tendréis más posibilidades de obtener una buena hipoteca.

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Compartiendo los gastos de casa -

Un matrimonio puede apoyarse mejor a la hora de pagar la renta, la hipoteca, las facturas de la casa o los gastos de los niños que una pareja no casada.

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Un ascenso en el trabajo -

Más allá de las consideraciones éticas de esta práctica, una de las ventajas de estar casado/a es que las empresas te ven como alguien responsable y una apuesta segura. Al fin y al cabo, es algo natural: cuando una persona tiene una hipoteca e hijos es muy poco probable que decida dejar su trabajo para viajar con la mochila a cuestas. ¡Por eso ascienden más a las personas casadas!

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Baja de paternidad/maternidad -

Disfrutar de una licencia de paternidad/maternidad en conjunto hará que los primeros meses de crianza del pequeño sean mucho más fáciles.

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Regalos de boda -

En una boda llueven los regalos. Unos prefieren dar una lista de objetos que desean y otros simplemente piden donaciones en una cuenta bancaria.

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Un seguro de auto más barato -

Las compañías suelen pensar que las parejas casadas conducen de una forma más responsable, especialmente cuando tienen hijos.

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Más probabilidades de ahorro -

Las personas casadas suelen tener más dinero, debido a una amplia serie de razones. Una de las más importantes es la estabilidad.

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Un presupuesto en común -

Compartir gastos es una bendición para el bolsillo.

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Seguro de vida -

Tu aseguradora incluirá a tu esposo/a en tu seguro de vida. 

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Cuentas en conjunto -

Es más fácil tener una cuenta en común con la que pagar la hipoteca, los gastos de la casa, los gastos de los niños, etc.

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Mejores tarjetas de crédito -

Te darán mejores límites de crédito y menos intereses si estás casado/a y entran dos salarios en la cuenta.

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Transferir un fideicomiso -

Si tu esposo/a tiene un fideicomiso a su nombre y quiere transferirlo al tuyo será mucho más fácil que si no estuvieseis casados. 

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La adopción es más fácil -

Las personas solteras pueden adoptar, pero es un proceso largo y tedioso. Para las parejas casadas es mucho más fácil, pues las autoridades suelen entender que su hogar es más estable y seguro para el niño.

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Compartiendo los costos -

No se trata solo de compartir la hipoteca o los gastos de la casa. Los viajes o los objetos caros serán más asequibles si se comparten sus gastos.

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Licencia de cuidado familiar -

Algunas compañías te ofrecerán un permiso para cuidar de tu esposo/a o de tus hijos si están enfermos. En cuanto a los solteros, esta situación se antoja mucho más difícil.

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Beneficios de jubilación y fallecimiento -

Las parejas casadas pueden beneficiarse de los seguros de fallecimiento y de la pensión de su compañero/a.

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Descuento en tasas universitarias -

A veces es posible que si tu esposo/a trabaja en una universidad pueda obtener un cuantioso descuento en tus tasas universitarias. 

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Organizando los impuestos -

Hacer la declaración de la renta en conjunto será siempre más fácil y barato.

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Crecimiento en tu carrera -

Las personas que están casadas tienen más interés y ambición por mejorar su posición en sus empresas.

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Indemnización por muerte -

Una persona casada tiene muchas más probabilidades de obtener una indemnización si su compañero/a muere por negligencia médica o de algún otro tipo.

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Beneficios tras un homicidio -

Lo mismo sucede en el eventual caso de homicidio. Una persona que no esté casada no tendrá mucho éxito a la hora de obtener una indemnización si su media naranja sufre este fatal destino.

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Una deuda compartida -

Compartir las responsabilidades financieras en el matrimonio hará que las cuentas salgan adelante de una forma más fácil. Muchas empresas están dispuestas a reestructurar una deuda si la pareja está casada.

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Responsabilidades compartidas -

Cuando una pareja casada comparte sus responsabilidades, la vida se hace más fácil para los dos.

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Beneficios de migración -

Cuando los esposos son de países diferentes, suelen disfrutar los beneficios de ciudadanía de ambas naciones.

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Compartiendo la propiedad -

Si el matrimonio tiene bienes compartidos y se produce un divorcio, las propiedades se dividirán de forma equitativa entre los dos esposos. Esto suena justo si ambos han contribuido de forma igualitaria a las finanzas de la pareja.

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Pensión alimenticia -

Una persona que no haya estado casada no puede pedir una pensión alimenticia al otro cónyuge en caso de separación. 

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Seguridad -

A pesar de que las cifras de divorcio están al alza, el matrimonio sigue aportando un gran sentimiento de estabilidad y seguridad.

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