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Siempre puedes decir que no -

Toma decisiones en base a tu poder adquisitivo. No pasa nada por no poder ir a una boda si no te lo puedes permitir (y lo mismo se aplica a otras ocasiones especiales como las despedidas de soltero).

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Organízate con tiempo -

Planear las cosas con tiempo te permitirá tomar decisiones más racionales y encontrar otras formas de ahorrar dinero. También te permite tener en cuenta otros gastos coyunturales como los accesorios, los desplazamientos en taxi, etc.

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No dejes la reserva para lo último -

Reservar con tiempo te asegurará poder alojarte en el recinto de la boda y así poder ahorrar dinero en el desplazamiento.

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Compara precios -

Si la boda es en otra ciudad o país, compara precios en diferentes páginas para poder comprar los billetes de avión más baratos.

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Usa los puntos de la tarjeta de crédito -

Aprovecha las millas y puntos de tu tarjeta de crédito, sobre todo si la boda es un sitio lejano.

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Crea un fondo de amortización -

Crea un fondo de amortización lo antes posible para apartar dinero cada mes y así cubrir los gatos necesarios.

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Lleva tentempiés -

Si vas a viajar para poder asistir a la boda, lleva tus propios tentempiés para matar el gusanillo durante el trayecto y así ahorrar dinero.

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Prioriza -

Sé realista y prioriza aquello que de verdad puedes permitirte.

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Ofrece tu casa - Si vas a participar en la despedida de soltero o soltera, propón tu casa como lugar de celebración para ahorrar dinero.

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Regala algo que ya tengas -

En lugar de comprar algo de cero, mira a ver si hay algo que ya poseas y que puedas regalar. Asegúrate de que sea un detalle apropiado para la ocasión y de que no lleve tu nombre o tus iniciales.

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Aprovecha las rebajas -

Aprovecha las rebajas para comprar tu modelito e incluso el regalo para los novios a un menor precio.

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Apuesta por unos zapatos neutros -

Comprar un nuevo par de zapatos para cada boda sale muy caro. Por lo tanto, plantéate hacerte con uno neutro y de buena calidad que combine con varios modelitos.

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Plantéate alojarte en otro sitio -

Aunque alojarse en el recinto de la boda puede ser la opción más sencilla, no siempre es la más barata. Explora los hoteles de la zona y decide cuál se adapta mejor a tu presupuesto.

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Compra de segunda mano -

Déjate caer por tiendas de segunda mano para escoger la ropa que llevarás a la boda por mucho menos dinero.

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Bodas de varios días -

Las bodas de varios días pueden suponer un gran gasto para los invitados. Si el presupuesto te alcanza para solo un día, no te sientas obligado a quedarte más tiempo.

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Despedidas de soltero/a -

Las despedidas de soltero y soltera pueden triplicar los gastos de los invitados. No te sientas obligado a pasarte del presupuesto para quedar bien con un amigo o familiar: ve solo a los eventos que te puedas permitir.

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Pide ayuda -

Los canguros y el transporte pueden ser caros, así que pregúntales amablemente a tus amigos o familiares si les importaría cuidar de tus hijos o acercarte al lugar de la boda.

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Usa tu talento -

Si tienes talento para las manualidades, ¿por qué no les preparas un regalo personalizado a los novios? Así ahorrarás dinero y les darás algo único con valor sentimental.

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Lista de regalos -

Las parejas suelen compartir una lista con los regalos que les gustaría recibir. No lo dejes para lo último, ya que de lo contrario podrías perder la oportunidad de comprarles algo que entre dentro de tu presupuesto.

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Regalo conjunto -

Ahorra dinero juntándote con varios amigos para comprar un regalo en común.

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No invites a bebidas -

Si en la boda no hay barra libre o si los invitados decidís continuar la fiesta en otro sitio cuando la celebración termine, no invites a la gente a bebidas. Deja la tarjeta de crédito o de débito en el alojamiento y tira solo de dinero en metálico.

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Establece un presupuesto -

Es fácil dejarse llevar por la emoción del momento y sentirse más generoso de la cuenta, pero si estás decidido a ahorrar, lo mejor que puedes hacer es establecer un presupuesto y ceñirte a él.

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Péinate y maquíllate por tu cuenta -

Aunque ir a la peluquería es un gustazo, también es un gasto más. Practica antes de ir a la boda y arréglate por tu cuenta.

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Alquila un traje o vestido -

Comprar un modelito para cada boda sale caro. ¿Por qué no te planteas alquilarlo? De esa manera derrocharás estilo y pagarás mucho menos (¡por no hablar de que también ahorrarás espacio en el clóset!).

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Comparte auto -

Si un amigo o conocido tiene planeado ir en auto a la boda, pregúntale si puede llevarte a cambio de pagar tu parte del combustible.

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Plantéate conducir -

Si el lugar de la boda no queda muy lejos, plantéate ser tú quien conduzca hasta allí. Así ahorrarás en transporte, alojamiento y en otros posibles gastos extra como las bebidas.

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Contrata un chófer -

Si formas parte de un grupo grande de amigos, también podéis plantearos pagar un medio de transporte entre todos que os lleve hasta el lugar de la boda.

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Reservas grupales -

Si varios invitados tenéis pensado alojaros en un hotel, compartid habitación o reservad a la vez para intentar obtener un descuento para grupos.

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Tarjetas regalo -

Si los regalos propuestos por los novios se te salen de presupuesto, siempre puedes ofrecerles una tarjeta regalo con la cantidad que tú elijas y dejar la elección en manos de ellos.

Fuentes: (Refinery29) (Bankrate) (VoucherCodes)

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