© Shutterstock

Cambios en las mamas -

El tejido mamario normal tiene una textura irregular. Pero cualquier bulto que parezca más duro o diferente debe ser examinado por un médico.

© Shutterstock

Cambios en las mamas -

Ambas mamas deben tener un tacto casi idéntico. Sin embargo, de nuevo, si notas una hinchazón rápida o inusual, o una decoloración como manchas rojas o moradas en el pecho, podría ser un signo de cáncer de mama inflamatorio.

© Shutterstock

Fatiga frecuente -

Las circunstancias de la vida pueden provocar fatiga temporal. Pero si experimentas una frecuente falta de energía sin tregua, puede ser indicativo de un problema de salud.

© Shutterstock

Fatiga frecuente -

Por ejemplo, ciertos tipos de cáncer, la insuficiencia hepática, la depresión, las enfermedades tiroideas, las cardiopatías y la anemia pueden causar fatiga crónica.

© Shutterstock

Hinchazón -

Todos nos sentimos hinchados después de comer o beber demasiado. Las mujeres también pueden experimentar esta sensación durante la menstruación.

© Shutterstock

Hinchazón -

Sin embargo, si te sientes hinchado a menudo o no puedes comer tanto como antes sin sentirte lleno, habla con un profesional médico.

© Shutterstock

Sangrado vaginal irregular -

El sangrado vaginal irregular puede deberse a varias causas, como cambios en los anticonceptivos, infecciones cervicales o vaginales, cuestiones relacionadas con las relaciones sexuales, enfermedades de transmisión sexual o la perimenopausia.

© Shutterstock

Sangrado vaginal irregular -

Además, el sangrado vaginal irregular también puede ser el primer signo de cáncer de cuello uterino o de útero. Así que asegúrate de estar al día con tu citología vaginal y acude a tu ginecólogo si se produce este sangrado.

© Shutterstock

Aumento de peso repentino -

Sin cambiar la dieta o los niveles de actividad, el aumento repentino de peso podría ser una señal de advertencia de insuficiencia cardíaca o del inicio de un problema de tiroides.

© Shutterstock

Aumento de peso repentino -

Una de las causas más comunes del aumento repentino de peso es el hipotiroidismo, que es una enfermedad por la que la glándula tiroides no produce suficientes hormonas.

© Shutterstock

Pérdida de peso sin explicación -

Una pérdida de peso inexplicable también puede indicar un problema de salud. Si estás perdiendo peso, pero no has cambiado tu dieta ni tu nivel de actividad, acude al médico.

© Shutterstock

Pérdida de peso sin explicación -

Además, la pérdida de peso inexplicable puede ser síntoma de depresión o de un problema gastrointestinal. También es indicativo de diabetes y celiaquía.

© Shutterstock

Dolor en el pecho -

El dolor torácico puede ser síntoma de varios trastornos, desde ardor de estómago y dolor muscular hasta molestias provocadas por la ansiedad. Sea cual sea el motivo, no debe ignorarse.

© Shutterstock

Dolor en el pecho -

Tanto si experimentas dolor torácico en reposo como durante la actividad, comunícaselo a tu profesional sanitario. Es el síntoma más frecuente de infarto, tanto en hombres como en mujeres.

© Shutterstock

Lunares que sangran o cambian -

Los lunares pueden dar problemas a la piel, y a menudo no se detectan a tiempo. Cuando revises un lunar, fíjate siempre en su tamaño y busca cualquier aspecto asimétrico, bordes irregulares o variaciones de color.

© Shutterstock

Lunares que sangran o cambia -

Si tienes un lunar que cambia o sangra, sin duda tendrás que acudir a un dermatólogo para que compruebe si necesitas una biopsia. Si en tu familia hay antecedentes de cáncer de piel, ten mucho cuidado con los lunares.

© Shutterstock

Sangre en la orina -

La sangre en la orina puede ser uno de los primeros signos de cáncer de vejiga. Pero también puede deberse a una infección o a un cálculo renal.

© Shutterstock

Sangre en la orina -

A veces, el volumen de sangre en la orina es suficiente para cambiar su color a naranja, rosa o rojo más oscuro. También puede estar presente un día y ausente al siguiente.

© Shutterstock

Dolor persistente en las piernas -

El dolor de piernas esporádico puede reaparecer de vez en cuando, pero si el dolor persiste, es aconsejable que te hagas un chequeo.

© Shutterstock

Dolor persistente en las piernas -

Los dolores musculares simples pueden tratarse en casa con reposo, hielo o elevando la pierna. Si el dolor persiste, habla con tu médico y averigua si necesitas alguna intervención o tratamiento.

© Shutterstock

Cambios repentinos en la vista -

Aunque es normal que la vista cambie con la edad, nunca ignores los cambios que afectan solo a un ojo, la visión doble, el dolor repentino o la incapacidad para ver el centro de lo que estás mirando.

© Shutterstock

Cambios repentinos en la vista -

Los cambios en la vista pueden deberse a algo tan simple como la fatiga visual, por ejemplo, mirar el ordenador durante demasiado tiempo. Pero también pueden indicar degeneración macular, glaucoma o problemas más graves, como una conmoción cerebral o un ictus.

© Shutterstock

Cambios inesperados en el tránsito intestinal -

Síntomas como sangre en las heces, estreñimiento o diarrea pueden indicar un problema de salud.

© Shutterstock

Cambios inesperados en el tránsito intestinal -

Afecciones como el síndrome del intestino irritable, la enfermedad inflamatoria intestinal y el cáncer de colon pueden ser la causa de un cambio en los hábitos intestinales.

© Shutterstock

Palpitaciones durante 15 minutos -

Ya sea por el estrés o por el ejercicio, no es infrecuente experimentar de vez en cuando taquicardia o palpitaciones en el pecho.

© Shutterstock

Palpitaciones durante 15 minutos -

Pero si estos síntomas duran más de 15 minutos podrían indicar un problema más grave, como una arritmia cardíaca o una cardiopatía.

© Shutterstock

Dolor de cabeza, mareos o debilidad en una parte del cuerpo -

Esto podría ser signo de un accidente isquémico transitorio (AIT). Son como "miniaccidentes cerebrovasculares" que, junto con los síntomas ya descritos, también pueden causar debilidad muscular en un lado, problemas de visión y dificultad para hablar.

© Shutterstock

Dolor de cabeza, mareos o debilidad en una parte del cuerpo -

Los AIT no causan lesiones cerebrales permanentes, pero aproximadamente el 30% de las personas que los sufren padecerán más tarde un ictus.

© Shutterstock

Falta de aire -

No ignores la falta de aire. Aunque la causa puede ser la falta de ejercicio o un aumento de peso reciente, también podría ser signo de una enfermedad cardíaca.

© Shutterstock

Falta de aire -

Otra causa frecuente de falta de aire es la insuficiencia cardíaca congestiva (ICC). Si los síntomas persisten, es vital buscar asistencia médica lo antes posible.

Fuentes: (Everyday Health) (Health Digest)

No te pierdas: Síntomas de problemas cardíacos que no debes ignorar

© Shutterstock