Las bajas temperaturas afectan al cerebro de forma sorprendente, llegando a influir en todo, desde la memoria hasta la energía y los reflejos. Como el cuerpo trabaja por mantener la temperatura, el cerebro ajusta sus funciones, lo que suele provocar cansancio, un procesamiento cognitivo más lento y dificultad para tomar decisiones. La exposición prolongada al frío también puede afectar a la salud mental, así como aumentar el estrés y la irritabilidad. Para saber más al respecto, haz clic para seguir leyendo.
¿Qué le hace el frío a tu mente? Descubre sus efectos
Una bajada de las temperaturas puede provocar cambios químicos disruptivos
© Shutterstock
RECOMENDADO PARA TI
Lo más leído