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Hallstat, Austria - Literalmente a orillas del mar Hallstätter See, esta villa alpina forma parte del paisaje cultural Dachstein-Salzkammergut (uno de los patrimonios mundiales de la Unesco).

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Bibury, Inglaterra - Está situado en Gloucestershire y a su lado pasa el río Coln. Se trata de un pueblecito pintoresco por sus casas con desvanes tradicionales hechas completamente en piedra.

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Colmar, Francia - Esta miniciudad desprende un carácter europeo enorme. Sus construcciones coloridas con toques medievales son el reclamo turístico más fuerte.

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Reine, Noruega - ¡Qué vistas! Esta villa pesquera se sitúa exactamente en el archipiélago de Lofoten, sobre el círculo polar ártico.

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Bled, Eslovenia - El Glacial Lake Bled nos ofrece unas vistas maravillosas de la propia miniciudad de Bled, famosa por su castillo en el islote con una iglesia esbelta como una aguja.

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Freudenberg, Alemania - Situada al norte de Rhine-Westphalia, esta villa enamora rápidamente a los turistas por su centro histórico (construido enteramente con entramados de madera que otorgan a las viviendas ese aspecto medieval).

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Mürren, Suiza - A 1,638 m sobre el nivel del mar, se encuentra. A su alrededor, tres picos muy famosos: Eiger, Mönch, y Jungfrau.

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Marsaxlokk, Malta - Varios de los mejores restaurantes de pescado y marisco de la isla se encuentran en este pueblo marinero. El colorido de los barcos, las casas bajas y sus aguas cristalinas lo dicen todo...

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Tellaro, Italia - Reconocido habitualmente como uno de los pueblos más atractivos del país, sus fachadas brillan con la puesta del sol y contrastan con un azul marino intenso.

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Telč, República Checa - Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco, este pueblo data del siglo XVI (aunque el castillo sea del XVII) y su arquitectura barroca nos deja boquiabiertos.

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Banská Štiavnica, Eslovaquia - ¡Es una oportunidad única para disfrutar de una villa medieval perfectamente conservada! No es de extrañar que la Unesco la haya declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por su importante valor histórico.

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San Gimignano, Italia - Su casco antiguo también es Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco. Cuenta con una arquitectura medieval inigualable y es uno de los reclamos turísticos fuertes de la Toscana.

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Óbidos, Portugal - La 'ciudad' amurallada portuguesa data del siglo XII y refleja perfectamente cómo era la vida en aquella época de realeza y poder.

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Kinsale, Irlanda - Sus calles son para verlas ¡y pasearlas! En todas ellas vive el color, la armonía, la paz... Es un pueblo pesquero precioso del condado de Cork.

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Brač, Pučiśća, Croacia - La isla ofrece un sol espectacular a sus turistas (y habitantes locales), aguas de colores intensos y construcciones sencillas pero muy bonitas.

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Albarracín, España - Situado sobre el río Guadalaviar, su muralla medieval resalta lo rural y agreste que es este pueblo. Además, cuenta con una larga historia que deberás descubrir allí.

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Chora, Grecia - Se encuentra en la isla de Folegandros y está construida sólo a 200 m sobre el nivel del mar. ¡En un acantilado! Las vistas son increíbles, claro.

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Tobermory, Escocia - La isla de Mull tiene a este pueblecito como capital. Entre tanto gris paisajístico, destaca por los colores vivos de sus viviendas.

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Porvoo Old Town, Finlandia - La primera vez que se mencionó esta ciudad medieval fue en el siglo XIV. En los siglos XVIII y XIX atrajo a un gran número de curiosos por su particular arquitectura con casas y graneros a lo largo del río.

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Polperro, Inglaterra - Durante los siglos XVIII y XIX, sirvió como lugar para actividades de contrabando. Esta villa pesquera situada en Cornish es un gran reclamo turístico hoy en día por la paz y el misticismo que se respira en el ambiente.

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Piódão, Portugal -

Ubicado profundamente en la Serra do Açor, este pueblecito cuenta con una curiosidad que salta a la vista: sus puertas y ventanas están siempre pintadas de azul. 

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Matera, Italia - Su centro histórico, "Sassi de Matera", es un enclave único para disfrutar. Su castillo tramontano y la gran colección de iglesias que alberga no dejan indiferente a nadie.

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Kazimierz Dolny , Polonia - Con monumentos de la época del Renacimiento, se trata de una villa famosa también por sus obras de arte. Es un destino para los amantes de la pintura de todo el mundo.

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Hollókő, Hungría - El viejo pueblecito es un ejemplo perfecto de cómo un enclave tradicional del siglo XVII se puede conservar sin problemas. Junto a los restos del castillo, es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

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Beddgelert, Gales - La mayoría de sus construcciones se hacen con piedra oscura, lo que le otorga un aspecto más rural. En 1949 fue noticia nacional porque un meteorito alcanzó uno de sus hoteles.

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Collonges-La-Rouge, Francia - Piedra y ladrillos rojos para un pueblo cuya estructura e historia son de lo más relevante que existe en el país.

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Giethoorn, Países Bajos - ¿Parece de ensueño, verdad? Lo cierto es que esta villa repleta de jardines bien cuidados, flores, arbolitos y mucho más, recibe a veces el nombre de Venecia de los Países Bajos. ¡Tiene hasta 180 pequeños puentecitos con canales!

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Cochem, Alemania - A orillas del río Moselle, sus viviendas de entramado de madera y sus calles empedradas son una joya para cualquiera. El castillo en la cima de la montaña es otro de sus reclamos turísticos.

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Durbuy, Bélgica - En ocasiones, se refieren a este lugar como la ciudad más pequeña del mundo. Su casco histórico está completamente empedrada y sus construcciones datan del siglo XVII.

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Rättvik, Suecia - A orillas del lago Silijan, este pueblo se enclava en el mismísimo corazón de Suecia. Sus casitas bajas y de madera en la época donde hay más nieve son un auténtico reclamo turístico.

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